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jueves, 19 de octubre de 2017

Grooming vs sexting, ¿en qué se diferencian?

Quizás el término “sexting” sea más conocido por su evidente parecido con la palabra “sexo”. Sin embargo el concepto “grooming” está en boca de pocas personas aún, a pesar de representar un problema grave, actual y cada vez más presente.

Vamos a intentar explicar en qué consiste cada uno y podréis ver la relación que guardan.


Por sexting entendemos la compartición voluntaria a través de medios digitales de contenidos íntimos (desnudos, mensajes explícitos, etc.). Lo habitual suele ser el uso de la cámara de los diferentes dispositivos (ordenadores, tablets, móviles, etc.) para hacerse fotografías que luego se comparten con otros individuos dentro de un supuesto ambiente de confianza y confidencialidad. El problema surge cuando ese supuesto pacto de confianza y confidencialidad se rompe y todo se descontrola, viéndose el o la protagonista implicado en un grave problema de vulneración a su intimidad, por no decir el daño provocado a su reputación.

Por grooming entendemos la actividad de un individuo que usa la suplantación de otro o la creación de una identidad falsa para recrear un ambiente de confianza hacia un menor, con la intención de conseguir materiales de contenido íntimo o, incluso, citas reales. Las consecuencias son muy graves, y pueden ir desde la comercialización o difusión de los materiales conseguidos dentro de redes pedófilas, hasta el atentado físico real contra el menor.

Si os detenéis a pensar un momento sobre estas dos actividades, veréis que, aún siendo diferentes, existe un posible vínculo: la compartición de esos materiales entre un atacante y la víctima. Es decir, el atacante que incurre en una actividad de grooming recrea un ambiente de confianza en el que convence, a través de ingeniería social, a su víctima. Una vez conseguido, logra convencer a la víctima de que le envíe fotografías, vídeos, etc. íntimos. A partir de ahí la “caja de Pandora” queda abierta y las consecuencias pueden ser de todo tipo, como podréis imaginar.

Si queréis ampliar la información sobre estas situaciones para poder prevenirlas o saber cómo reaccionar frente a ellas, os recomiendo la lectura de los siguientes artículos:



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